No tener ni un pelo de tonto no significa necesariamente ser calvo, aunque cualquier alopécico que se precie puede justificar con sorna su extrema calvicie y pasar por ser inteligente. No es el caso del señor Tellado, porque a pesar de no ser lo que se entiende por calvo, tampoco parece destacar como muy inteligente; es simplemente uno de los muchos que lucen muy poco pelo en España; por lo menos en la cabeza. Según unas recientes estadísticas, nuestro país es el segundo de Europa con mayor porcentaje de calvos.
De modo que se necesita ser muy pusilánime como para negarse a admitir la diferencia que existe entre tener poco pelo y ser calvo, máxime cuando para aparentarlo, hoy resulta tan de moda raparse el cráneo. De manera que llegado el momento en que ya no me quede ni un pelo, si que podré acudir a lo que exige la moda masculina contemporánea.
La señora Montero, haciendo gala de su esmerada educación, ha tenido muy en cuenta el hecho de no querer herir susceptibilidades al indicar al entrevistador que entre los dos aludidos miembros con gafas del PP citados en la entrevista, se refiriera al que “tenía menos pelo” y no “calvo” como sugiriera el portavoz del PP.
¿Y qué decir de aquellos otros políticos que presumen de pelo en pecho? Abascal cree que es en el tórax y no en otro lugar de nuestra anatomía donde se debe presumir de tener pelo y ello obliga a llevar desabotonada la camisa para demostrar la casta a borbotones que fluye de las entretelas y que distingue a los patriotas españoles de otras distintas razas de la periferia europea. Sin embargo, ¡qué lástima! Hoy casi todo el mundo tiene tendencia a rasurarse, si fuera preciso hasta el pubis, lo que propicia un severo distanciamiento de las buenas costumbres heredadas de aquellos estamentos castrenses de rancio abolengo, anteriores incluso al descubrimiento de América, pasando luego por los gloriosos Tercios de Flandes hasta nuestros aciagos días.
A decir del partido Vox, España ya no es lo que era. Ha sido por completo esquilada.
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Licenciado en Historia del Arte y Bellas Artes
